sábado, 30 de janeiro de 2016

Liberalismo: inimigos à esquerda e à direita.


Artigo de Carlos Rodríguez Braun no site La Libertad.org sobre o antiliberalismo, comum tanto à esquerda quanto à direita. De fato, se pensarmos nas desgraças do século XX (fascismo, nazismo e comunismo), constataremos que elas têm raízes comuns: foram todas contra as ideias liberais e o livre mercado:
Desde siempre los enemigos de la libertad han tendido a confluir, independientemente de lo poco o mucho que pudiese separarlos en otros ámbitos. Por eso habló Hayek de “los socialistas de todos los partidos” y por eso cuando Luciano Pellicani comparó las ideas de Lenin y de Hitler encontró tantas coincidencias.
Una importante figura de la política gala declaró a El Semanal de ABC:
Estaría encantada si los franceses dejaran de comprar carros alemanes y sólo compraran carros Renault y Peugeot. En cuanto que los países recuperaran su moneda, la cotización del marco alemán subiría y la del franco francés caería. De esa forma, Francia sería mucho más competitiva, se venderían más carros franceses porque serían más económicos.
Esta figura política podría ser de izquierdas. Pero esta figura no es de izquierdas. Y, además, no importa. Se trata de Marine Le Pen. Y efectivamente no importa porque el antiliberalismo es lo dañino, y no su traje de derecha o de izquierda. Lo dañino es el cierre de mentes que propicia el cierre de fronteras, que da lugar siempre a la pobreza y la exclusión.
Nótese, hablando de pobreza, la increíble pobreza de la argumentación de la señora Le Pen. Empieza por negar la libertad de los ciudadanos de Francia de comprar lo que les venga en gana. Y sigue con la clamorosa estupidez de que basta con devaluar la moneda para ser competitivo, y vender y exportar más. A ver, doña Marine: ¿No se da Ud. cuenta de que si devaluar fuera la receta de la prosperidad, entonces los venezolanos o mis compatriotas argentinos serían los más acaudalados y los mayores exportadores del planeta? 
BLOG ORLANDO TAMBOSI

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